Hotel l'Aunette Cottage

La chambre était grande, chaleureuse, la literie agréable. La deco authentique avec poutres et tomettes au sol. Le domaine doit être très agréable aussi en été avec un joli parc, des coins détente et une piscine . L’accueil est à l’image du lieu, sympa, convivial. Petit déjeuner aux produits du terroir locaux ou de regions françaises auxquelles la propriétaire est attachée. Le restaurant était fermé mais cela donne très envie d’y retourner pour découvrir cette face du lieu.

Nous avons passé deux nuits à L’Aunette cottage. L’endroit est charmant : les 14 chambres sont réparties en plusieurs cottages très jolis. Plein d’endroits où se poser à l’ombre des arbres pour profiter de la tranquillité du lieu. Piscine très agréable. La chambre est très confortable. Le petit-déjeuner fait maison et les repas sont délicieux. L’accueil y est extrêmement chaleureux. Un hôtel où l’on se sent chez soi.

¡Mi estancia en el encantador hotel L'Aunette Cottage en Chamant, Francia, fue simplemente excepcional! Desde el momento en que llegamos, nos sentimos como en casa gracias al cálido y amable trato que recibimos por parte de todo el personal. El servicio que nos brindaron fue impecable, y la atención al cliente superó todas nuestras expectativas. Los propietarios (Jean Phillipe y Dja), con su trato cercano y amigable, nos hicieron sentir como parte de su familia. Siempre estaban dispuestos a ayudarnos y asegurarse de que nuestra estancia fuera perfecta. La comida casera que se sirve en este hotel es una delicia. Cada plato estaba lleno de sabores frescos y auténticos de la región, lo que hizo que nuestras comidas fueran una experiencia inolvidable. Además, la limpieza en todo el hotel era impecable, lo que nos hizo sentir cómodos en todo momento. Las habitaciones eran verdaderamente encantadoras, con una decoración rústica y acogedora que nos hizo sentir como si estuviéramos en un cuento de hadas. Pero lo mejor de todo fue la piscina exterior climatizada, que nos permitió relajarnos y disfrutar del hermoso entorno de Chamant, incluso cuando el clima no era perfecto. Recomendaría este hotel rural a cualquiera que esté buscando una escapada relajante en la campiña francesa. Es un lugar donde la hospitalidad, la comida deliciosa y el ambiente encantador se combinan para crear una experiencia verdaderamente memorable. ¡No puedo esperar para volver!