Hostal Santo Tomé

Intento mirar bien donde me alojo cuando viajo, después de llamar a este Hostal dejé de buscar. La atención de J.Carlos muy buena dándonos facilidades tanto para la entrada como salida. Llegamos justo a la puerta en coche,no es demasiado difícil hay un bolardo al principio de la calle pero te lo abren sin problemas. El parking, lo teníamos reservado, está a dos minutos y no es de los complicados. El acceso principal es por su tienda de regalos donde se toma el ascensor, cuando está cerrada hay que subir a un primero para el ascensor. Nos dieron dos habitaciones en vez de una cuádruple, no nos molestó mis hijas no son pequeñas. Ambas perfectamente limpias y ordenadas. Calefacción y aire acondicionado, baño clásico y amplio, armario empotrado con perchas , tv, galletitas ,hervidor con café e infusiones y una neverita. Sobresale la calidad de las toallas. Las ventanas con porteras garantizan que no pase la luz matutina. Daban a la calle y por las mañanas temprano pasaba algún coche rápido y se escuchaba un poco así como por la noche la gente saliendo del bar de enfrente. Ubicación perfecta para turistas. Para desayunar hay varias cafeterías que abren a las 9 , la churrería desde mucho más temprano. Cuando vuelva a Toledo tengo claro a quien tengo que llamar.

Ubicación muy buena, el trato del personal ha sido excelente, habitación cálida y bastante nueva , limpieza diaria, muy atentos , hemos estado muy cómodos, volveremos y por supuesto lo recomendamos 100 x 100.