Hotels With Gym in Lumbini, Nepal

In such a backcountry place and away from the Buddha Garden, there is such a luxurious hotel, there is a casino at the gate, and hehe should be a place to squander the Indian local tyrants. Large children can be accommodated in an extra bed and must have an extra bed. The hotel itself is very good and it feels weird.

The first time I came to Lumbini with my friends, I didn’t expect to encounter such a boutique hotel. There are many types of food, local food, Chinese food, Indian food... Many options, the room size is oversized, the most important, the service is particularly intimate, super five-star praise, we returned to Kathmandu because we did not buy tickets in time, The ticket was sold out on the same day, and I had to return home the next day. I was anxious. The hotel restaurant manager tried to contact us. Finally, a local driver took us back. Although the journey was bumpy, it was safe in the middle of the night. The driver was dedicated and tired. Guilt moved and heartbroken, especially moved! ! The Nepalese people are so good, I will come again next time!

Second time coming to Lumbini, second time staying here. very good! The people at the hotel are very nice. The most important thing is that the location is very close to the Maya Devi Temple and the station.

The hotel is near Bhairahawa airport but is quite a distance away from all the tourist sights. The hotel does not accept credit card.

The hotel is really old, so the hardware is not very good! At night, I feel a lot of mosquitoes, but I don't bite! The waiter was very nice, the restaurant was very good, the fried chicken and fried rice we ordered were good, recommended! Breakfast is not a buffet, it is a package prepared by the hotel according to the head, it feels very careful, great! I saw the crane at the hotel in the morning.

Great place to stay!!!!

Recientemente me alojé en este hotel, que es realmente uno de los mejores de la ciudad. Sin embargo, la ubicación no es muy atractiva para los turistas extranjeros, ya que hay poco turismo en la zona. A pesar de esto, el hotel ofrece algunas comodidades interesantes, especialmente si planeas visitar Lumbini, que está a unos veintitantos kilómetros. La habitación en la que me alojé estaba bien, pero no era nada del otro mundo. Se notaba un poco el desgaste en los armarios y los enseres, lo que le daba un aire de necesidad de renovación. Además, el suelo también mostraba signos de desgaste. En cuanto al desayuno, según la página del hotel, se ofrece en plan buffet. Sin embargo, como no había muchos huéspedes durante mi estancia, no se facilitaba ese tipo de desayuno. Esto resultó bastante frustrante, ya que te iban ofreciendo las cosas poco a poco. Te ofrecían café o té primero, luego te preguntaban si querías fruta, luego yogur o pan tostado. Este proceso hizo que lo que podría haber sido un desayuno de 15 minutos se alargara considerablemente. A pesar de estos inconvenientes, la atención del personal fue bastante buena. Todos fueron muy agradables y serviciales. Nos facilitaron un taxi para visitar Lumbini, donde nació Buda, así como otro taxi para nuestro traslado al aeropuerto. Sin embargo, tuvimos una experiencia muy desagradable con respecto a las habitaciones. En nuestra primera habitación, donde nos dijeron al principio que nos quedaríamos, apareció una salamandra o lagartija a media tarde. Nos quejamos y nos cambiaron a una segunda habitación donde se suponía que no habría ningún problema pero antes de dormir otra vez una lagartija. Pero al día siguiente, apenas amaneció, volvió a ocurrir lo mismo por tercera vez apareció otra lagartija en nuestra habitación. Salió de los huecos donde están los armarios y se escondió detrás del televisor en los agujeros para los cables de conexión. La verdad es que ya no daba lo mismo porque estábamos a punto de marcharnos del hotel. La explicación del personal responsable fue que tenían un problema con las lagartijas y que se lo dirían al propietario para intentar resolverlo. Me parece chocante que en tres habitaciones diferentes tuviéramos el mismo problema; no puede ser esto un hotel que se supone que es de cuatro estrellas. En resumen, aunque el hotel tiene sus áreas de mejora y presenta cierto desgaste, sigue siendo una opción razonable en la ciudad si buscas comodidad y acceso a Lumbini. Sin embargo, la situación con las lagartijas es inaceptable para un establecimiento de su categoría.

Rumbini Buddha garden resort is not only a hotel but also a beautiful garden with lotus pond , surrounded by lawns and forests, I really appreciate staff members of the hotel, they are so kind and sincere, helping me a lot in many ways, ready to offer what you need instantly. The room is clean, spacious and good light with morden facilities like Ac, hot shower, fast WiFi. It has two baconies where you can watch views and relax and dry your clothes. They are very considerate when cleaning rooms, even helped to fold my messy clothes and shoes, and to put back the clothes you dried in the bacony into the room, keeping everything tidy and nice. The food was very delicious too, I asked them to send to my room, they are very patient, packed the food carefully and delivered with the whole set of delicate dishes, glasses, spoon, knife and so on. In the morning you can hear the birds singing and the staff are diligently doing gardening, cleaning, washing. They even bow down to wipe the bricks of the road leading to room buildings in the garden which touches and impresses me. I am really grateful to all those who have served and helped me with warm hospitality and patience. I highly recommend Rumbini Buddha garden. It's a wonderful choice when you you are in Lumbini.

The first time I came to Lumbini with my friends, I didn’t expect to encounter such a boutique hotel. There are many types of food, local food, Chinese food, Indian food... Many options, the room size is oversized, the most important, the service is particularly intimate, super five-star praise, we returned to Kathmandu because we did not buy tickets in time, The ticket was sold out on the same day, and I had to return home the next day. I was anxious. The hotel restaurant manager tried to contact us. Finally, a local driver took us back. Although the journey was bumpy, it was safe in the middle of the night. The driver was dedicated and tired. Guilt moved and heartbroken, especially moved! ! The Nepalese people are so good, I will come again next time!

In such a backcountry place and away from the Buddha Garden, there is such a luxurious hotel, there is a casino at the gate, and hehe should be a place to squander the Indian local tyrants. Large children can be accommodated in an extra bed and must have an extra bed. The hotel itself is very good and it feels weird.

Second time coming to Lumbini, second time staying here. very good! The people at the hotel are very nice. The most important thing is that the location is very close to the Maya Devi Temple and the station.

The hotel is really old, so the hardware is not very good! At night, I feel a lot of mosquitoes, but I don't bite! The waiter was very nice, the restaurant was very good, the fried chicken and fried rice we ordered were good, recommended! Breakfast is not a buffet, it is a package prepared by the hotel according to the head, it feels very careful, great! I saw the crane at the hotel in the morning.

The hotel is near Bhairahawa airport but is quite a distance away from all the tourist sights. The hotel does not accept credit card.

Recientemente me alojé en este hotel, que es realmente uno de los mejores de la ciudad. Sin embargo, la ubicación no es muy atractiva para los turistas extranjeros, ya que hay poco turismo en la zona. A pesar de esto, el hotel ofrece algunas comodidades interesantes, especialmente si planeas visitar Lumbini, que está a unos veintitantos kilómetros. La habitación en la que me alojé estaba bien, pero no era nada del otro mundo. Se notaba un poco el desgaste en los armarios y los enseres, lo que le daba un aire de necesidad de renovación. Además, el suelo también mostraba signos de desgaste. En cuanto al desayuno, según la página del hotel, se ofrece en plan buffet. Sin embargo, como no había muchos huéspedes durante mi estancia, no se facilitaba ese tipo de desayuno. Esto resultó bastante frustrante, ya que te iban ofreciendo las cosas poco a poco. Te ofrecían café o té primero, luego te preguntaban si querías fruta, luego yogur o pan tostado. Este proceso hizo que lo que podría haber sido un desayuno de 15 minutos se alargara considerablemente. A pesar de estos inconvenientes, la atención del personal fue bastante buena. Todos fueron muy agradables y serviciales. Nos facilitaron un taxi para visitar Lumbini, donde nació Buda, así como otro taxi para nuestro traslado al aeropuerto. Sin embargo, tuvimos una experiencia muy desagradable con respecto a las habitaciones. En nuestra primera habitación, donde nos dijeron al principio que nos quedaríamos, apareció una salamandra o lagartija a media tarde. Nos quejamos y nos cambiaron a una segunda habitación donde se suponía que no habría ningún problema pero antes de dormir otra vez una lagartija. Pero al día siguiente, apenas amaneció, volvió a ocurrir lo mismo por tercera vez apareció otra lagartija en nuestra habitación. Salió de los huecos donde están los armarios y se escondió detrás del televisor en los agujeros para los cables de conexión. La verdad es que ya no daba lo mismo porque estábamos a punto de marcharnos del hotel. La explicación del personal responsable fue que tenían un problema con las lagartijas y que se lo dirían al propietario para intentar resolverlo. Me parece chocante que en tres habitaciones diferentes tuviéramos el mismo problema; no puede ser esto un hotel que se supone que es de cuatro estrellas. En resumen, aunque el hotel tiene sus áreas de mejora y presenta cierto desgaste, sigue siendo una opción razonable en la ciudad si buscas comodidad y acceso a Lumbini. Sin embargo, la situación con las lagartijas es inaceptable para un establecimiento de su categoría.

Rumbini Buddha garden resort is not only a hotel but also a beautiful garden with lotus pond , surrounded by lawns and forests, I really appreciate staff members of the hotel, they are so kind and sincere, helping me a lot in many ways, ready to offer what you need instantly. The room is clean, spacious and good light with morden facilities like Ac, hot shower, fast WiFi. It has two baconies where you can watch views and relax and dry your clothes. They are very considerate when cleaning rooms, even helped to fold my messy clothes and shoes, and to put back the clothes you dried in the bacony into the room, keeping everything tidy and nice. The food was very delicious too, I asked them to send to my room, they are very patient, packed the food carefully and delivered with the whole set of delicate dishes, glasses, spoon, knife and so on. In the morning you can hear the birds singing and the staff are diligently doing gardening, cleaning, washing. They even bow down to wipe the bricks of the road leading to room buildings in the garden which touches and impresses me. I am really grateful to all those who have served and helped me with warm hospitality and patience. I highly recommend Rumbini Buddha garden. It's a wonderful choice when you you are in Lumbini.

Great place to stay!!!!

The first time I came to Lumbini with my friends, I didn’t expect to encounter such a boutique hotel. There are many types of food, local food, Chinese food, Indian food... Many options, the room size is oversized, the most important, the service is particularly intimate, super five-star praise, we returned to Kathmandu because we did not buy tickets in time, The ticket was sold out on the same day, and I had to return home the next day. I was anxious. The hotel restaurant manager tried to contact us. Finally, a local driver took us back. Although the journey was bumpy, it was safe in the middle of the night. The driver was dedicated and tired. Guilt moved and heartbroken, especially moved! ! The Nepalese people are so good, I will come again next time!

Second time coming to Lumbini, second time staying here. very good! The people at the hotel are very nice. The most important thing is that the location is very close to the Maya Devi Temple and the station.

The hotel is really old, so the hardware is not very good! At night, I feel a lot of mosquitoes, but I don't bite! The waiter was very nice, the restaurant was very good, the fried chicken and fried rice we ordered were good, recommended! Breakfast is not a buffet, it is a package prepared by the hotel according to the head, it feels very careful, great! I saw the crane at the hotel in the morning.

Rumbini Buddha garden resort is not only a hotel but also a beautiful garden with lotus pond , surrounded by lawns and forests, I really appreciate staff members of the hotel, they are so kind and sincere, helping me a lot in many ways, ready to offer what you need instantly. The room is clean, spacious and good light with morden facilities like Ac, hot shower, fast WiFi. It has two baconies where you can watch views and relax and dry your clothes. They are very considerate when cleaning rooms, even helped to fold my messy clothes and shoes, and to put back the clothes you dried in the bacony into the room, keeping everything tidy and nice. The food was very delicious too, I asked them to send to my room, they are very patient, packed the food carefully and delivered with the whole set of delicate dishes, glasses, spoon, knife and so on. In the morning you can hear the birds singing and the staff are diligently doing gardening, cleaning, washing. They even bow down to wipe the bricks of the road leading to room buildings in the garden which touches and impresses me. I am really grateful to all those who have served and helped me with warm hospitality and patience. I highly recommend Rumbini Buddha garden. It's a wonderful choice when you you are in Lumbini.

Hotel environment is good, the room is big, like it! Thank you for the service of Trip.com , the hotel I booked before was full, Trip.com took the initiative to help change another hotel, the service attitude is very good!

It is perhaps the only true upscale hotel in Lumbini, not too far from the development area, on the main road to/from the airport. The room was large and the bed comfortable, but the sheets were old and rough.Staff are friendly but they will not assist beyond getting a taxi. The restaurant is large but it is a shame that they do not restock very often. When you order from the menu, many things are not available and some may not have ever been served. I don't mind them not having some of the cocktails but I am referring to simple things like beer or coffee. Also, in the restaurant always ask if food is spicy. Even dishes that are not spicy anywhere else in the world, are served with chilli unless you asked them not to add it. Given the size of the hotel and the facilities it could have, we left with a sense of a lost opportunity for the hotel, and in a way for all of Lumbini.

The hotel is near Bhairahawa airport but is quite a distance away from all the tourist sights. The hotel does not accept credit card.

Recientemente me alojé en este hotel, que es realmente uno de los mejores de la ciudad. Sin embargo, la ubicación no es muy atractiva para los turistas extranjeros, ya que hay poco turismo en la zona. A pesar de esto, el hotel ofrece algunas comodidades interesantes, especialmente si planeas visitar Lumbini, que está a unos veintitantos kilómetros. La habitación en la que me alojé estaba bien, pero no era nada del otro mundo. Se notaba un poco el desgaste en los armarios y los enseres, lo que le daba un aire de necesidad de renovación. Además, el suelo también mostraba signos de desgaste. En cuanto al desayuno, según la página del hotel, se ofrece en plan buffet. Sin embargo, como no había muchos huéspedes durante mi estancia, no se facilitaba ese tipo de desayuno. Esto resultó bastante frustrante, ya que te iban ofreciendo las cosas poco a poco. Te ofrecían café o té primero, luego te preguntaban si querías fruta, luego yogur o pan tostado. Este proceso hizo que lo que podría haber sido un desayuno de 15 minutos se alargara considerablemente. A pesar de estos inconvenientes, la atención del personal fue bastante buena. Todos fueron muy agradables y serviciales. Nos facilitaron un taxi para visitar Lumbini, donde nació Buda, así como otro taxi para nuestro traslado al aeropuerto. Sin embargo, tuvimos una experiencia muy desagradable con respecto a las habitaciones. En nuestra primera habitación, donde nos dijeron al principio que nos quedaríamos, apareció una salamandra o lagartija a media tarde. Nos quejamos y nos cambiaron a una segunda habitación donde se suponía que no habría ningún problema pero antes de dormir otra vez una lagartija. Pero al día siguiente, apenas amaneció, volvió a ocurrir lo mismo por tercera vez apareció otra lagartija en nuestra habitación. Salió de los huecos donde están los armarios y se escondió detrás del televisor en los agujeros para los cables de conexión. La verdad es que ya no daba lo mismo porque estábamos a punto de marcharnos del hotel. La explicación del personal responsable fue que tenían un problema con las lagartijas y que se lo dirían al propietario para intentar resolverlo. Me parece chocante que en tres habitaciones diferentes tuviéramos el mismo problema; no puede ser esto un hotel que se supone que es de cuatro estrellas. En resumen, aunque el hotel tiene sus áreas de mejora y presenta cierto desgaste, sigue siendo una opción razonable en la ciudad si buscas comodidad y acceso a Lumbini. Sin embargo, la situación con las lagartijas es inaceptable para un establecimiento de su categoría.

It was a very good hotel. The food is delicious. The air conditioner was working without problems. The employee service was perfectly fine.